Magino Perez un joven negro
desvinculado de la suerte, Al parecer esta le había dado la espalda
.En sus años de mocedad nunca fue visto con buenos ojos, por el solo hecho de
ser negro, magino Perez .En su juventud de labriego, Tomo la decisión de
escapar a la gran ciudad y espero el momento para engancharse en la
primera carreta de plátanos
-Ama me vol. par pueblo, tan bueno he pasar trabajo
Un día quiero ser grande como papa i tener mi
propia parcela
– Hay mijo tan bueno tu interés de ir para la
ciudad İ pero ten cuido con la mala gente tu sabe que te quien mucho
magino nadien te quiere como tu madre
-Ma yo también te quiero por eso me voy pa la
ciudad que estés bien
Ma
Magino Perez madrugo ese lunes de abril del año
1905. En busca de su nueva vida avisto a lo lejos alguien gritaba
-Arre…arre. Maldito caballo viejo tenemos que
llegar temprano
Se agacho en una peña grande y se abalanzó
dentro de la careta junto con los plátanos, arropándose con la lona de hojas de
plátanos al corre el veía como se alejaba de su antigua morada veía como se
borraba su casa, luego desaparecía las lomas i en la lejanía solo quedaba el
horizonte ya su región se avía perdido con el trote de la carreta y el caballo.
-Maldito caballo…arre. Arre. Que casi llegamos
-Oye…que es lo que pasa parece que mi carga
ha crecido
El inspector Bill Watson de los estados unidos,
tomo su rifle y se dirigía a la parte trasera de la carreta. Para registrar la
carga, de repente veía como se movía algo debajo de la lona de plátanos que él
había puesto encima de los plátanos
-ha de ser algún animal salvaje…la veras con mi
30-30 te voy a despedazar
-noooooo…por favor no me mate cumpa
-¿Quién carajo eres? Maldito negro como te
atreves a montar en mi carreta
-perdone seño solo qué riba di a la ciudad
-no sabes que a los negros como tú los matan por
casería
Vas a tener que pagar….
Bill le puso su rifle en la frente y le amenazo con
dispararle luego le golpeó fuertemente en la cabeza desmallándose magino en el
acto lo monto en la carreta y llegaron a una casucha comercial antes de
llegar a la ciudad. Donde el viejo mercader Michael
-hola Bill…..que me traes hay parece que tienes
plátanos verdes y negros
-Si Michael me encontré este negro en mi carreta pero
aquí te traigo tu mercancía son 2 dólares
-maldito salteador siempre me engañas con tu
mercancía barata
Y el negro cuanto
-ese te lo dejo de gratis…..JA JA JA…
Se acercaron a la carreta tomaron a magino por los
pies y lo lanzaron fuertemente al piso le patearon y despertaron.
-Ole maldito negro. Que tal estas…so paliza
que te daremos
-manque tan pasando misericordia seños
-Misericordia tu madre- dijo Bill
Toma maldito negro…….
Lo abofetearon una y otra vez le tiraron agua fría
encima le amarraron los brazos a la carreta en el lugar del caballo y le
gritaron…
-arre… arre maldito negro…arre, magino se desplomó
en el suelo de tanto cansancio y maltrato
-ya está bien con esto no volverá a meterse con los
blancos….JA JA JA…
…
-grito Bill-
Tomaron el cuerpo de magino y lo tiraron por una
barranca gritándole
-ya no me debes nada maldito negro….JA JA JA…
Magino rodo cuesta abajo al pie de la colina de
arrollo hondo en la ciudad de santo domingo destrozado con ropas raídas llego a
la ciudad, las carretas iban y venían los caballos transitaban a gran velocidad
se acercó a un puesto de frutas se tiro al suelo desmallado
-malditos abusadores manque solo uno quien come y
lo quien mata-
Al decir estas palabras se desplomo, el vendedor
del puesto de frutas le tiro una cubeta de agua y le grito en voz alta
-levántate maldito negro acaso pagaste ese lugar de
la calle para dormir
Abe nuncio que espécimen tan feo misericordia a la madre
que te pario-
-Seño misericordia no ven que me han
golpeado, defecado, maltratado
En vez de eso dadme un poco e pan y le ayudo con mi
fuerza a cargar toó eso saco he frutas toó los días que quiera,-
-Ta bien negro te daré el pan tienes que arriar esas
carretas hasta la hacienda
Todos los días cargas los sacos de frutas y limpiar
el pavimento-
-Ta bueno seño, y solo quiero come y unos centavos
pa mi ma en el bohío
-Catarina…Catarina…Arreglas esas frutas que mañana
vienen los soldados españoles y bien que les gusta joder…Tienes que
lavarlas bien para que nos las compren
Catarina era la hija del vendedor Anastasio Méndez,
hombre poco amable y tosco pero de corazón noble, de esos que aparentan ser
malvados pero en el fondo son buenas personas. Catarina se quedó observando los
monstruosos músculos del negro magino mientras este cargaba los sacos de
frutas, miraba su trasero redondeado y al negro mirarla ella fingía mirar para
otro lado
-permiso señorita excuse déjeme cargo los sacos he
fruta
Con fuerza esplendorosa tomo los sacos y los
arrojos a la carreta
Limpio el pavimento y se dirigía a llevarlos a la
hacienda, el camino era pedregoso e infernal con mosquitos picando se
descubierta espalda azotaba el caballo y arriba por fin a la hacienda de
los Méndez.
-Llegamos maldito negro vivirás en esa barraca y me
cuidaras los animales
-Ta bueno ahí seño gracia por toó yo trabajare pa
ganarme el pan
Al llegar a la hacienda todos descansaron
magino se fue a su barraca y los Méndez a su mansión, de repente sonaron
las ruedas de unas carretas y caballos que se pararon en frente de la hacienda
-Méndez…Méndez… estamos aquí en nombre del gobierno
del presidente Carlos mórales lenguaco a cobra los impuestos en nombre de los
estados unidos
-está bien Bill aquí está tu dinero 30
dólares-
-oye Méndez viejo cabron y como está tu hija
-con mi hija no te metas toma tu dinero y as tu
trabajo
-está bien Méndez me iré nos volveremos a ver el
próximo mes
Magino escucho el nombre de Bill y se llenó de
rabia al recordar como lo había maltratado y golpeado pero se escondió en su
barraca para escuchar la conversación, Bill se aprestaba a marcharse cuando
observo que habían abierto la vieja barraca se detuvo y dijo.
-Oye Méndez tienes otro animal en la barraca,
sabes que debes pagarme el impuesto jajajajaja-
-No Bill no es un animal es mi nuevo peón-
Peón…que peón… Déjame verlo-
-Magino…Sal a conocer al inspector Bill de los
estados unidos-
-al diablo maldito negro no te moristeis, eres tú
tienes 7 vidas-
-De que hablas Bill que te a echo este negro-
-Ese pedazo de mierda se metió en mi carreta lo iba
despedazar con mi
Rifle 3030 y ahora lo tienes aquí-
-Perdónalo Bill yo me haré cargo de él –
-Ya está bien pero ten cuidado negro o ya
verás-
Bill Arreo sus caballos y se marchó con sus hombres
a la ciudad
Mientras magino airado se quedó en la hacienda
-oye negro ten mucho cuidado con ese inspector Bill
es peligroso te puede matar-
-Ta bueno seño…Ta bueno…Yo haré lo que el seño
diga-
Volvieron al mercado en la polvorienta ciudad
colonial de santo domingo
Los carruajes y carretas estaban repletos de frutas
los españoles e ingleses compraban mercancías y todo era un ambiente de
mercadería. Magino descargaba la carreta con los sacos de frutas y los
ponis en el local de los Méndez y luego limpiaba el pavimento.
-magino….magino… toma esos dos pesos son tu
paga –
-dos peso seño….bueno está bien gracias –
Miro fijamente al cielo y recordó la promesa que le
había hecha a su madre y sin pensarlo mucho le dijo al vendedor
-Seño…Seño… Como le mando los dos pesos a mi ma al
bohío del campo-
-Por correo magino te cobraran 10 centavos-
Está bien, yo te lo enviare donde vive tu madre
En ese momento en que se encontraban hablando
magino y el vendedor Méndez se aparece Bill en el local y saluda
-hola pedazo de negro que tienes hay….ya pagaste
tus impuestos-
Jajajajaja. Con eso bastara…
Le arrebato los dos pesos de la mano y se movilizo
hacia su carreta y se marchó a gran velocidad
-ve seño que abusador es ese Bill…Me ha dejado sin
mi salario-
Tan solo porque soy negro, debo vengarme
-no…magino no quiero problemas déjalo yo te pagare
de nuevo
Y le mandaras a tu madre-
-Catarina…Catarina…tráeme dos pesos y dáselo al
negro este-
Catarina se acercó a magino, magino la miro y ella
lo miro se enamoró de ella pero sabía que no podía hablarle por respeto al
señor Méndez
-gracias señorita…-
-De nada magino-
Ella lo miro con una marida lasciva, mientras
mordía sus labios
Se marchó contorneando sus caderas mientras magino
disimulaba no mirarla
-gracia al seño-vamos a trabajar pa recompensar ya
vera-
La habían terminado el trabajos magino estaba en la
barranca y procedía tomar un baño cuando de repente siente que le abren la
barraca...
-quien anda hay…quien anda hay… salga-
-silencio por favor magino soy yo Catarina-
Y… que busca la seño...Sola a esta hora y el seño-
Cállate magino mi padre salió a comprar un
cargamento de frutas a la ciudad
Y…Que quiere la seño…
-no te hagas magino tu sabes lo que quiero…
Se desnudó y se acostó entre las pajas que cubrían
el catre de magino
-Ven hazme el amor… magino por favor…-
-no. Seño como puedo hacerle eso a tu padre-
-No… magino no es a mi padre es a mi ven por favor
Magino la miro y observo un cuerpo blanco como la
leche con tonos rosas en sus pezones que le hicieron arder de deseo…aunque
trato de morder su deseo
No pudo aguantar más y un enorme busto se dibujó en
su pantalón como queriendo romper el poliéster. Ella se levantó le bajo
lentamente el pantalón le hice el sexo orar luego se acostó el la penetro una y
otra vez hasta llegar al éxtasis.
-lo volveremos a hacer magino cuando quieras-
Me gusto bastante-
-seño… o quiero problema…Con su padre él me matara
si lo sabe…-
De repente se escucha el sonido de carretas que se
acercan a la hacienda el vendedor ha llegado con la mercancía
-Catarina…Catarina donde estas-
Se vistió Catarina rápidamente se entró por la
puerta trasera de la hacienda y recibió a su padre algo desaliñada, mientras
magino fingió limpiar la barraca.
-buenas papa como te fue con la compra-
-Fue buena Catarina…fue buena…-
Donde está el negro ese que venga a descargar todas
esas frutas mañana aremos buen dinero-
-aquí estoy seño…vamos a bajar todo eso ahora mismo
Cuando magino bajo todo el cargamento, fue a la
barraca. Mientras en la hacienda cerca de la barraca se aparecieron cinco
hombres armados encapuchados, encañonaron a Catarina, a su padre y
los lo llevaron dentro de la casa.
-dame todo el dinero viejo Ho matare a tu hija y
quemare la hacienda –
El vendedor sé que do estupefacto no podía hablar
de la impotencia pero para salvar a su hija exclamo
-llévense todo lo que quieran pero dejen a mi hija-
Jajaja…Jajaja…viejo cabron claro que la
dejaremos
Después que nos entregues el dinero
Méndez fue al viejo escritorio de pino abrió la gavetas
y saco 500 dólares y diez pesos
– tomen el dinero y vállense-
-Jajaja…no será así tan fácil también nos
llevaremos los frutos-
Tomaron el dinero y procedían a ir donde
estaban los frutos que magino había bajado para montarlos en una carreta
-pero, aquí falta algo viejo tu peón el negro
ese de mierda donde esta
-peón… ya sé quién eres, maldito Bill porque me
haces esto Bill-
De repente Bill se volteo hacia Méndez con su 38 en
manos y le disparo dos balazos Méndez cayó al suelo casi moribundo mientras
Bill le decía
-Maldito viejo no debiste nunca decir eso no puedo
dejarte vivir después que me reconociste-
Bill le disparo en la frente muriendo Méndez en el
acto, mientras sus amigos violaban a Catarina. Destrozando su vestido y
poseyéndola una y otra vez dejándola tirada en el suelo. Mientras salían a la
entrada de la hacienda.
Fueron a la barraca donde estaba magino pero este
no estaba se había escondido debajo de la carreta de Bill con la escopeta de
Méndez
Cuando BILL se montó en su caballo escucho una
voz que le grito
-como ya te vas seño…. Falta alguito todavía-
-Eres tu maldito negro ya verás con te despedazo-
Cuando Bill se disponía a sacar su revólver sintió
un frio en su vientre, al mirar su camisa vaquera noto un agujero que le
traspasaba y cayó en el pavimento mientras sus tres amigos intentaron escapar
fueron alcanzados por los basucasos de magino muriendo todos en el acto
-ha maldito negro ganaste...haaaaaaaa.-
Magino presuroso entro en la hacienda
Catarina estaba desmallada, la tomo en sus brazos la llevo a la cama y
llamo a la policía, le puso el rifle en la mano a Bill limpio sus huellas
al llegar la policía determino que Bill había matado a sus compañeros a
Méndez y luego se había suicidado
Después de 3 meses de el velorio de Méndez magino
siguió su trabajo ayudando a vender en el local a Catarina, una noche
Catarina fue a la barraca y le dijo a magino me olvidaste quiero que lo hagamos
como esa noche
-Negro ya no aguanto más ven a vivir con migo
-Me aceptaría un negro pobre como yo
Claro mi amor me has cuidado y ayudado todo este
tiempo
Esa noche Catarina y magino se confundieron en
deseo llegaron al éxtasis en el amor y vivieron juntos tuvieron 10 hijos
5 hembras y 5 varones
Y vivieron felices Para siempre.
Fin
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